2 de mayo de 2011

PELICULAS: "Hereafter"

Mi intención era continuar con la serie de temas históricos y comentar el documental Marwencol sobre un norteamericano que pierde la memoria tras una paliza y como terapia construye en su jardín un pueblo de muñecos ambientado en la Segunda Guerra Mundial. Las reglas que en él crea y las interacciones que simula le hacen mejorar su condición mental. Sin embargo, voy a dejarlo en esta breve referencia pues no resultó tan fluido e interesante como pensaba, por ello antes de acabar el documental he elegido ver la última película de Clint Eastwood Hereafter, traducida al castellano como Más allá de la vida.


Protagonizada por Matt Damon y Cécile de France estamos ante una película de tres historias entrecruzadas que plantea una reflexión en torno a la muerte, no sólo en torno a qué puede ser sino, especialmente, sobre las diversas formas que tenemos de afrontarla, incluyendo una crítica interesante a aquellos que se aprovechan de nuestra necesidad última de darle sentido para ganar dinero.Como los protagonistas de la Primera Generación de la Escuela de Frankfurt nos mostraron en sus escritos, por mucho que intentemos plantearlo racional y científicamente, el tema de la muerte siempre hace tambalear nuestra forma de ver el mundo, al final siempre vamos a necesitar darle un sentido. El polo del sentido es esencial, no todo es racional y medible, y la película muestra esta realidad claramente. Este es uno de los motivos por los que la considero interesante.

Sin embargo, recomiendo la película no porque me parezca una de las mejores que he visto últimamente sino porque la historia de los dos hermanos gemelos, Marcus y Jason, ha conseguido que mientras tenía una inevitable sonrisa en la boca, una lágrima apareciera por mi mejilla sin poder remediarlo --por arte de magia--. No sé si tendrá que ver con la resaca o con que me habré levantado algo sentimentaloide pero esta historia convierte las dos horas de duración de la película en algo que, a mi juicio, merece la pena. 

Ese tipo de experiencias es lo que se busca cuando se lee una novela, cuando se cuenta una historia de cualquier tipo y más aún cuando se va al cine. Además, estamos ante una película excelentemente rodada, con unos escenarios espectaculares ya que está ambientada en París, San Francisco y Londres, y con unos diez o quince primeros minutos espectaculares. Muy bonitas también las constantes referencias a Dickens, muy presentes en toda la película. Por todo ello esta es mi entrada de hoy.

Ya me contaréis si se os cae la lagrimilla con Marcus y Jason, unos personajes adorables.

Javi

3 comentarios:

  1. A mi me da mucha pena marcus...
    La pelicula esta bastante bien. Mantiene un ritmo aceptable pese a ser de naturaleza lenta, lo cual de normal no es mi tipo.

    ResponderEliminar
  2. La verdad es que para ser lenta no da esa impresión, no se hace muy cansina sino que consigue enganchar, aún así tampoco es un peliculón espectacular.

    ResponderEliminar
  3. eso es cierto, de peliculon tiene poco. Pero no está mal para una tarde de cine con los amigos.

    ResponderEliminar