21 de abril de 2011

Series: para días de resaca (parte II): “The inbetweeners”

Ayer fue un día histórico para el blog: ¡3 visitas en total! Nunca habían sido tan tristes las estadísticas, Carlos y yo no nos explicamos qué pudo pasar, así como si una final de Copa del Rey entre los dos equipos con más seguidores de España tuviera más tirada que nuestro blog, ¡eso no puede ser! Ni siquiera nuestros  seguidores de Singapur, Rusia o Canadá acudieron a su cita habitual.

Para tratar de remediarlo un poquito, hoy voy a seguir con mi moda de comentar pequeñas  joyitas divertidas que vienen desde Inglaterra, en este caso hablo de una serie de televisión llamada The Inbetweeners. Estamos ante una serie gamberra e irreverente que nos presenta la vida cotidiana de una pequeña pandilla de adolescentes que vive en una pequeña ciudad inglesa. Un grupo que se forma en el momento en que Will —el narrador y protagonista de la misma— va a parar a un colegio público al ser trasladado desde su antiguo colegio privado tras el divorcio de sus padres. 



Lo cómico de esta serie radica —como, por ejemplo, en la maravillosa The Big Bang Theory— en lo penoso y risorio de cada uno de sus personajes que, cosa muy a destacar, tienen uno una personalidad única muy interesante, aunque toda la acción gira en torno a la típica frustración del grupo de amigos que nunca se come un rosco y no paran de fantasear con chicas, ligar, tener sexo… especialmente interesante en este sentido resulta Jay el personaje más llamativo de la serie: mentiroso compulsivo nunca para de contar sus “hazañas sexuales” al resto de miembros del grupo que, o bien no lo creen, como es el caso del protagonista Will, aún sabiendo que es mentira quieren creerlo en muchas ocasiones como Simon, o le creen a pies juntillas como sucede con el miembro más empanado del grupo: Neil. Esto dará lugar a  miles de situaciones absurdas y cómicas pero que no tienen nada de ficticias pues todos hemos vivido, conocido y oído acontecimientos como los que narra la serie. 

Sé que utilizo mucho la expresión “risas aseguradas” pero aquí sólo cuadraría con cierto grupo de personas ya que creo estamos ante una serie especial, de las típicas que o bien odias o bien no puedes parar de reír con ella, algo muy típico con las series inglesas como puede comprobarse con la famosa Little Britain o con su secuela Come fly with me.
 
Estamos ante una serie de capítulos de 24 minutos de duración, con tres temporadas de apenas seis capítulos, dadle una oportunidad y posiblemente no os arrepentiréis. Recomiendo empezarla por el primer capítulo pero si queréis mi opinión sobre los mejores entre ellos echad un vistazo a: Night Out in London y The Camping Trip —este último es el capítulo final de la tercera temporada pero la serie tiene la ventaja de que cada capítulo es prácticamente independiente del resto, excepto en pequeños detalles—. Espero vuestra opinión para ver si mi incondicionalidad por esta serie está justificada o no, al menos he comprobado que repartí bastantes risas al recomendar Four Lions a ver si sigue la racha. 

Javi

No hay comentarios:

Publicar un comentario